Desde que era pequeña mis dos postres preferidos han sido siempre el arroz con leche y el flan de huevo, así que os podéis imaginar mi felicidad cuando hace unos años descubrí este flan de arroz con leche, mis dos postres favoritos unidos en una sola receta. Como su nombre indica es la unión perfecta de estos dos superclásicos de los postres caseros, un flan de huevo preparado con arroz con leche o un arroz con leche cuajado al horno, como más os guste verlo, pero en todo caso un postre irresistible.
El flan de arroz con leche es un postre combinación de arroz con leche y flan de huevo. Es un arroz con leche al que se añade huevo batido y se cuaja al Baño María en el horno, como cualquier otro flan.
Algunas veces he visto etiquetadas recetas similares como budin de arroz con leche o pudding de arroz con leche (no confundir con lo que en inglés se llama rice pudding, que es la denominación para nuestro arroz con leche), pero a mi me gusta más la denominación de flan de arroz con leche, tal vez por lo mucho que me gustan todo tipo de flanes.
Para preparar el arroz con leche base de la receta el método que he seguido consiste en cocer primero el arroz con una pequeña cantidad de agua hasta que la absorbe totalmente (de esta forma se libera el almidón), añadiendo a continuación la leche. Aunque es el el que detallo en la receta se puede emplear cualquier otro método para preparar el arroz con leche: cocerlo solo en la leche, el método express en el que se cuece primero en agua y se termina de cocer en la leche o incluso usando la olla express para reducir el tiempo de preparación. Todos ellos están detallados en recetas anteriores en el blog, os dejo los enlaces:
- arroz con leche clásico
- arroz con leche
- arroz con leche en olla express
- arroz con leche al chocolate
Es necesario dejar enfriar un poco el arroz con leche antes de añadir los huevos batidos, para evitar que se cuajen con el calor. No es necesario que se enfríe totalmente, con que esté templado es suficiente.
El arroz con leche es bastante pesado y tiene tendencia a caer al fondo del flan. Si os fijáis en las fotos de la porción se ve que la parte de arriba (la que está en el fondo del molde) es la que tiene todo el arroz y la base tiene una textura de flan de huevo, sin granitos de arroz. Si queremos que la textura queda más homogénea se puede triturar el arroz con leche antes de incorporar los huevos batidos, así el flan tendrá una textura más lisa. Si no queremos triturarlo totalmente también se puede dar un golpe de batidora para romper un poco el arroz pero sin que quede hecho papilla.
Para aromatizar la leche he empleado cáscara de limón y canela, la combinación clásica para el arroz con leche, pero os animo a probar otras combinaciones, sustituyendo la piel de limón por otros cítricos, la versión con cáscara de mandarina me parece especialmente delicada, o cambiando la canela por otras especias como la vainilla o el cardamomo.
El flan de arroz con leche se cuece al Baño María en el horno, como es habitual en los flanes de huevo. Para ello se pone el molde con el flan en otra fuente o recipiente que pueda ir al horno y se llena de agua, que debería llegar como mucho a mitad de la altura del molde del flan, para evitar que pueda entrar el agua dentro del molde.
La textura del flan se asienta tras unas horas de reposo. Se saca del horno cuando los bordes están cuajados pero el centro está todavía un poco blando, terminará de cuajar con el reposo. Es un postre que prefiero preparar el día anterior y dejar que repose toda la noche en la nevera, así conseguimos una textura perfecta.
Antes de servir el flan se desmolda sobre un plato de servir. A mi es un flan que siempre me cuesta desmoldar, la verdad. Entre la textura más densa del arroz con leche y que la capa del arroz del fondo a veces se pega un poco al molde a pesar de caramelo líquido no siempre se desmolda de forma limpia, de hecho si os fijáis en el lado derecho la superficie está un poco irregular.
Podemos preparar un flan grande para dividir en porciones o preparar porciones individuales, salen 6-8 flanes individuales según el tamaño de los moldes. El tiempo de horno indicado es para el flan grande, para los individuales necesitaremos algo menos de tiempo, en unos 30 minutos estarán listos.
Cuando hago flan suele preparar caramelo casero, no me agrada mucho el comprado, pero eso es una manía personal y la verdad es que es comodísimo. Si queréis emplear caramelo "de bote" no hay ningún problema, se puede usar perfectamente, simplemente nos saltamos los pasos de la preparación del caramelo y distribuimos el caramelo comercial en la flanera.
Si os gusta la idea del arroz con leche solidificado en un molde hay otro clásico en el que el arroz con leche se mezcla con nata montada y se cuaja empleando gelatina, sin usar horno, el arroz emperatriz.
- 6-8 personas.
- 100 gramos de arroz.
- 800 ml. de leche.
- 100 gramos de azúcar.
- Un palito de canela.
- La piel de un limón.
- 4 huevos.
- Un pellizco de sal.
- 4 cucharadas de azúcar para el caramelo. Se puede usar caramelo comercial.
- 2 cucharadas de agua para el caramelo.
Poner el arroz en una cazuela. Añadir agua de modo que quede justo cubierto. Añadir un pellizco de sal.
Poner al fuego, removiendo constantemente hasta que el arroz absorba todo el agua, así soltará el almidón y quedará más cremoso. Cuidado porque absorbe el agua enseguida.
Añadir la leche, el palito de canela y la piel del limón (intentaremos coger la menor cantidad posible de parte blanca).
Cuando la leche comience a hervir bajar un poco el fuego y dejar cocer hasta que el arroz esté tierno, removiendo con frecuencia, cuanto más removamos más cremoso quedará. Yo lo tengo a fuego medio (5 sobre 9) unos 25-30 minutos. Lo suelo hacer un poco menos lento que cuando lo preparo para comer directamente.
Añadir el azúcar y cocer 5 minutos más removiendo para que se disuelva bien.
Apartar del fuego, retirar la canela y las pieles de limón y dejar que se temple un poco antes de añadir los huevos.
Se puede triturar un poco el arroz con leche, sin llegar a hacerlo una crema lisa pero deshaciendo un poco el grano. Yo normalmente meto la batidora en la cazuela y trituro un poco. Queda bastante entero (es más complicado triturar el arroz cocido de lo que parece) pero un poco más roto y así evitamos que el arroz se apelmace en el fondo del molde.
Batir los cuatro huevos como para tortilla y añadirlos al arroz con leche. Remover para mezclarlo bien, pero sin batir demasiado para que no se forme espuma.
Si vamos a preparar el caramelo casero poner en un cazo al fuego las 4 cucharadas de azúcar y dos cucharadas de agua.
Calentar hasta que el azúcar empiece a disolverse. No removerlo porque el azúcar cristaliza, se puede mover un poco el cazo pero sin usar una cuchara hasta que empiece a burbujear. Cocer el caramelo hasta que adquiera un color dorado claro, sin perderlo de vista porque el caramelo se caliente muy rápido y se puede quemar con facilidad.
Verter el caramelo en el molde o moldes que vayamos a utilizar, moviéndolos bien para el que caramelo cubra el fondo y parte de las paredes. El caramelo se debe manipular siempre con mucha prudencia porque podemos quemarnos con facilidad.
Si usamos caramelo de bote verterlo en el fondo del molde y distribuirlo bien por el fondo y la mitad de la pared.
Verter la mezclar de arroz con leche con los huevos en el molde.
Poner el molde en una fuente de horno (o cualquier otro recipiente en el que quepa con holgura) y verter agua caliente que llegue más o menos a la mitad de la altura del flan. No debería pasar esa altura porque corremos el peligro de que al hervir salte y se meta al flan, que no cuajará bien.
Mientras preparemos el molde precalentar el horno a 180 grados.
Poner el flan en la parte central del horno.
Hornear hasta que esté cuajado, necesitará entre 45-60 minutos. Lo sacamos cuando todo alrededor esté bien cuajado pero el centro se vea todavía un poco blandito, terminará de hacerse con el reposo.
Sacar del horno y dejar reposar 15 minutos dentro del baño María.
Sacar la flanera del recipiente del Baño María. Cuando se enfríe del todo ponerlo en la nevera varias horas (mejor toda la noche) para que se asiente.
Para desmoldarlo pasar un cuchillo de punta roma todo alrededor entre el flan y el molde para separarlo.
Poner un plato invertido sobre el flan y voltear el molde y el plato.
Si el flan no cae sujetar el plato y el molde y hacer unos movimientos secos arriba y abajo hasta que se desprenda. A mi es de los flanes que más me cuesta desmoldar.
Cortar en cuñas para servir.
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