Arroz con leche

El arroz con leche es sin lugar a dudas mi postre favorito desde que era muy pequeña. Me sorprende un poco que haya tardado tiempo en publicarlo, con la de veces que lo hago.

Es uno de los postres más populares de nuestra gastronomía y de los que más se preparan en casa, ya que es muy sencillo de hacer y sólo emplea ingredientes que se tienen habitualmente en casa. Cuando está bien cocinado y es cremoso resulta un postre exquisito.

Ingredientes

• 6-8 personas.

• 1 litro de leche.
• 100 gramos de arroz de grano redondo (el arroz normal de siempre, los que no se pasan no sirven).
• 100 gramos de azúcar.
• 1 palito de canela.
• La piel de un limón (con la menor parte blanca posible).
• Canela molida para servir.

Preparación

Poner la leche en una cazuela junto con el palito de canela y la cáscara de limón. Poner al fuego hasta que comience a hervir.

Cuando la leche comience a hervir añadir el arroz y bajar el fuego de forma que se mantenga un hervor muy suave. En este momento la cantidad de arroz parece muy pequeño para la cantidad de leche que tenemos y da la sensación de que vamos a conseguir más una sopa que otra cosa, pero al ir cociendo el arroz absorbe mucha leche y crece, por lo que la cantidad es la adecuada. Si ponemos más arroz entre lo que crece al cocer y lo que espesa con el almidón que suelte nos quedaría demasiado espeso.

Cocer a fuego muy suave (que apenas borbotee la leche) hasta que el arroz esté tierno, removiendo constantemente con una cuchara de madera. Al no parar de remover se consigue que el arroz vaya soltando el almidón, que ayudará a que la leche quede ligada y el plato quede muy cremoso. Necesita cocer aproximadamente una hora. Según va cociendo el arroz crece y el caldo se vuelve más espeso por efecto del almidón que suelta el arroz.

Retirar del fuego y añadir el azúcar, removiendo bien para que se mezclen bien con el arroz con leche. El azúcar se añade al final para evitar que se pegue. Además con el calor el azúcar que está cerca del fondo se carameliza un poco y coge un color un poco más oscuro, con lo que el resultado final no quedaría tan blanco.

Quitar las cortezas de limón y la canela y dejar que se enfríe antes de servirlo. Si nos gusta mas frío (puede servirse templado o frío) meterlo en la nevera antes de servir.

Para servir repartir en platos de postre o cuencos y espolvorear con canela molida.

Quedará así de cremoso

Consejos y sugerencias

• Lo más clásico es emplear cáscara de limón y canela para perfumar el arroz con leche. Sin embargo podemos modificar las especias empleadas para conseguir modificar ligeramente el sabor de este delicioso postre. Acompañando a la canela o sustituyéndola se puede poner una rama de vainilla. O se puede añadir también un clavo de olor o una vaina de cardamomo. En este caso es importante quitarlos justo al retirar del fuego, ya que en caso contrario darán un sabor muy fuerte a arroz que haya alrededor suyo.
• Lo mismo sucede con la piel de limón. Puede sustituirse por la piel de otro cítrico para obtener matices y sabores distintos. Por ejemplo la piel de mandarina usada en lugar de la piel de limón da al arroz con leche un sabor delicioso. Es importante siempre intentar cortarlas con la menor cantidad posible de piel blanca, ya que amarga.
• A mí me gusta mucho como se queda hecho solamente con leche. Al remover constantemente el arroz libera el almidón y el postre queda muy cremoso. Si quedemos que quede todavía más cremoso se pueden sustituir 200 ml. de leche por la misma cantidad de leche evaporada. O incluso por nata, aunque en este caso sólo ponemos 100 ml. de nata en lugar de 100 ml. de leche.