La canela es uno de mis sabores favoritos, como es fácil adivinar por el nombre del blog. Así que cuando hace unas semanas empecé a buscar un pan para participar en la celebración del Día Mundial del Pan, la gran fiesta de los panaderos caseros, que se celebra hoy 16 de octubre me pareció que este pan de canela era una opción perfecta para unir el pan y el blog. Es un pan de leche suave y esponjoso con una vistosa espiral de canela que aporta un estupendo sabor a canela además de un bonito aspecto, perfecto para el desayuno y la merienda.
Este pan de canela está inspirado en un pan de canela (cinnamon bread) que encontré entre las abundantes recetas de King Arthur Flour hace ya un tiempo. La receta me encantó desde la primera vez que la vi, no solo por lo prometedor del sabor a canela en el pan, sino por la extremada sencillez con la que se conseguía un pan visualmente muy bonito: espolvorear una buena cantidad de canela antes de enrollar la masa para formar el pan.
La receta original emplea leche en polvo y copos de puré de patata por lo que para preparar el pan de canela he partido de un viejo conocido del blog, el pan de leche fácil de Dan Lepard, adaptando un poco la receta. He optado por emplear leche y agua, pero también se podría hacer solo con leche.
Un detalle importante para que el pan quede bien. Al extender la masa y antes de espolvorearlo con canela se pinta toda la superficie con huevo batido. Puede parecer un paso superficial, pero el huevo ayuda a que se peguen las distintas capas de masa para que no se abran en el horno. Sin el huevo como la canela mantiene aisladas las vueltas es fácil que al crecer en el horno el pan se abra un poco y nos queden huecos en las rebanadas. No es una gran tragedia más allá de que se nos pueda caer la mermelada pero queda más bonito si la rebanada no tiene agujeros.
Este año será la séptima vez que participe en el Día Mundial del Pan. Aquí os muestro un recopilatorio de mis anteriores participaciones en el evento:
- Un pan (un molde de 30 cm. de largo).
- 500 gramos de harina panadera.
- 200 ml. de leche.
- 125 ml. de agua.
- 10 gramos de levadura fresca.
- 10 gramos de sal.
- 25 gramos de azúcar.
- 60 gramos de mantequilla.
- 50 gramos de azúcar.
- Una cucharadita y media de canela molida.
- Dos cucharaditas de harina panadera.
- Un huevo para pintar el pan.
Poner la harina en un bol. Añadir el resto de ingredientes de la masa: leche, agua, sal, levadura desmenuzada, azúcar y la mantequilla a temperatura ambiente.
Mezclar con una cuchara, una rasqueta flexible o la mano hasta que no quede líquido suelto.
Volcar la masa sobre la encimera.
Amasar hasta obtener una masa lisa y brillante. Al principio la mantequilla hace que sea un poco pegajosa, pero como es poca cantidad enseguida se vuelve manejable y deja de pegarse. Para mí resulta muy cómodo empezar con el amasado francés de Richard Bertient y continuar amasando de la forma tradicional cuando ha dejado de pegarse. Necesitaremos unos 10 minutos.
Hacer una bola con la masa y ponerla de nuevo en el bol. Taparla (yo suelo ponerla dentro de una bolsa de plástico) y dejarla fermentar en un sitio cálido y sin corrientes durante 2 horas. Más o menos doblará su volumen.
Para preparar la espiral de canela poner en un bol la canela, el azúcar y las dos cucharadas de harina. Mezclar bien hasta que quede homogéneo.
Batir en otro bol el huevo junto con una cucharada de agua.
Volcar la masa sobre la encimera y amasar suavemente para desgasificar.
Extenderla un poco con las manos hasta formar un rectángulo. Con ayuda de un rodillo formar un rectángulo de aproximadamente 22-24 centímetros en el lado corto (para un molde de 30 centímetros, si el molde es de otro tamaño lo dejaremos siempre un poco más corto que el molde) y unos 45-50 en el lado largo. Levantarla de la encimera según vamos extendiendo para comprobar que no se pega. Si es necesario se puede untar la encimera con un poco de aceite para ayudar a que no se pegue. Si la masa es muy tenaz y se encoge la dejamos reposar un par de minutos y continuamos extendiendo.
Pintar el rectángulo de masa con la mezcla de huevo y agua. Reservar el resto para pintar el pan antes de meterlo al horno.
Espolvorear todo el rectángulo con la mezcla de canela, dejando un par de dedos libres en el lado corto más alejado de nosotros.
Empezando por el lado corto más cercano enrollar la masa hasta formar un cilindro.
Pellizcar los extremos para sellarlos.
Poner en cilindro de masa en el molde previamente engrasado con una gota de aceite, dejando el cierre debajo de la masa.
Tapar con un plástico puesto sobre la masa. De nuevo una bolsa es una buena opción porque permite tapar la masa dejando espacio para que crezca.
Dejar fermentar durante una hora y media más o menos. Crecerá casi hasta el borde.
Precalentar el horno a 200 ºC.
Pintar la superficie si se desea con el huevo batido que ha sobrado. Le dará un aspecto más brillante.
Poner el molde en la parte central del horno, sobre la bandeja.
Bajar la temperatura a 180 grados después de 10 minutos.
Hornear en total durante 40-45 minutos. Si la superficie se tuesta mucho se puede tapar con papel de aluminio.
Sacar el molde del horno y dejarlo reposar durante 10 minutos sobre una rejilla.
Extraer el pan del molde y dejar que se enfríe totalmente sobre una rejilla.
¡Yo también soy un amante de la canela! Tu pan se ve hermoso ¡Gracias por participar nuevamente en el Día Mundial del Pan!
ResponderEliminarYour loaf of beautiful. And no holes! Very impressive! I will try the egg trick next time :)
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