El pollo a la francesa es un plato de la cocina italo-americana (Chicken Francese o Chicken Francaise). Aunque lo he buscado reconozco que no he conseguido encontrar una explicación del motivo por el que el plato recibe la denominación a la francesa. Es una receta deliciosa elaborada con filetes de pollo rebozados que es terminan de cocer en una salsa de vino blanco y limón. El pollo queda super tierno y con un sabor a limón riquísimo y una salsa en la que no podremos dejar de mojar pan hasta dejar el plato limpio. Para adornar el plato nada mejor que unas rodajas de limón doradas en la misma sartén que la salsa.
- 4 personas.
- Una pechuga de pollo (las dos mitades) partida en filetes finos.
- El zumo de un limón y su ralladura (la ralladura es opcional pero a mí me parece que da muy buen sabor).
- Un limón para decorar (opcional).
- Dos huevos.
- Harina.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Dos cucharadas de mantequilla (unos 30 gramos) (opcional, se puede emplear sólo aceite).
- Un vasito de vino blanco (100 ml.).
- 300 ml. de caldo de pollo.
- 3 dientes de ajo (puede sustituirse por ajo en polvo).
- Perejil picado.
- Sal y pimienta negra molida.
Limpiar los filetes de pechuga eliminando los restos de grasa que puedan tener. Salpimentar.
Pelar los dientes de ajo. Majarlos en el mortero o pasarlos por un prensador de ajos.
Batir en un plato los dos huevos como para tortilla. Añadir la mitad de ajo majado (o un poco de ajo en polvo) y media cucharadita de perejil picado. Remover bien.
Poner harina para rebozar las pechugas en otro plato.
Poner al fuego una sartén con un par de dedos de aceite.
Rebozar los filetes de pechuga pasándolos por harina (sacudirlos para eliminar el exceso) y por el huevo batido, de modo que queden completamente cubiertos.
Cuando el aceite esté caliente freír los filetes por tandas hasta que estén dorados por los dos lados.
Sacarlos a un plato cubierto con papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.
Si vamos a hacer las rodajas de limon de adorno partir el limón en rodajas.
Poner el caldo de pollo a calentar. Si no tenemos caldo a mano se puede preparar también con un cubito de caldo. A mí no me gustan mucho cubitos de caldo, así que si no tengo suelo preparar un caldito de verdura con un trozo de puerro, una ramita de apio, zanahoria y un poco de cebolla.
Poner las dos cucharadas de mantequilla y dos cucharadas de aceite (o cuatro cucharadas de aceite si no queremos emplear mantequilla) en una sartén amplia.
Cuando se caliente añadir las rodajas de limón y dejar hasta que se doren un poco por el borde, unos 3 minutos, dándoles la vuelta a la mitad.
Sacar las rodajas de limón a un plato y reservar.
Poner el resto de ajo machacado en la sartén (si se emplea ajo en polvo lo pondremos al final con el caldo) y dejar que se cocine un momento. No dejarlo mucho porque se quema con facilidad.
Añadir una cucharada más bien rasa de harina y remover bien para que se mezcle con el aceite. Cocinar un minuto removiendo para que no sepa a crudo.
Añadir el vino blanco, el caldo y zumo de limón. A mí me gusta añadir también la ralladura del limón, ya que da un sabor a limón más pronunciado. Cocinar durante 5 minutos removiendo con frecuencia hasta que la salsa espese un poco.
Bajar el fuego.
Volver a poner el pollo en la sartén, con cuidado para que no se rompa mucho el rebozado. Dejar cocer a fuego muy suave durante unos 10 minutos.
Al retirar del fuego espolvorear con perejil picado en abundancia.
Repartir los filetes en los platos, regándolos con la salsa de la sartén.
Una vez más, es un placer leerte :)
ResponderEliminarMe encantan todas sus recetas, gracias por compartir sus conocimientos, Dios los bendiga!
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