Albóndigas en salsa

De las innumerables recetas para preparar albóndigas sin duda dos de las más populares son las albóndigas en salsa y las albóndigas con tomate. A nosotros nos gustan las dos por igual y las alternamos sin cesar durante todo el año.

Para preparar las albóndigas a mí me gusta emplear carne de ternera y cerdo mezclada al 50 por ciento. Se puede variar la proporción entre las carnes e incluso introducir otro tipos de carnes, como pavo o pollo, pero a mí me gusta que haya siempre algo de carne de cerdo para que queden más jugosas. Sólo con carne de ternera para mi gusto quedan demasiado secas.

Para acompañar las albóndigas nada mejor que unas patatas fritas. Las de las fotos están cortadas en rejilla con una mandolina, pero con las "normales" en forma de bastones o taquitos quedan igual de bien.

Ingredientes

• 4 personas.

• 750 gramos de carne picada (mitad cerdo, mitad ternera).
• Un huevo.
• 30 gramos de miga de pan (la miga de dos rebanadas de pan de molde o de un trozo de pan de barra de unos 4 dedos).
• Leche para mojar la miga.
• Una cebolla.
• 3 zanahorias.
• Un vasito (100 ml) de vino blanco.
• Perejil.
• Aceite de oliva virgen extra.
• Sal.
• Pimienta negra molida.
• Una hoja de laurel.

Preparación

En primer lugar vamos a preparar la salsa.

Picar la cebolla. A mí me gusta pasar la salsa por la batidora (en casa no son muy aficionados a los tropezones de cebolla), por lo que no importa que no quede muy regular, pero si la dejamos sin pasar hay que cortarla en cuadritros muy pequeños.

Eliminar los extremos de las zanahorias, rasparlas y cortar en rodajas.

Poner al fuego una cazuela baja y amplia (es en la que terminaremos de cocer las albóndigas) con un buen chorro de aceite.

Cuando se caliente añadir la cebolla y la zanahoria. Yo dejo un poco de zanahoria (una más o menos) sin añadir ahora y la incorporo después de triturar. Así hay cachitos de zanahoria.

Añadir un poco de sal.

Bajar el fuego y pochar la verdura hasta que la cebolla se ponga trasparente, unos 10 minutos.

Añadir el vino blanco y subir el fuego un par de minutos para que se evapore el alcohol.

Triturar si se desea y volver a poner la salsa en la cazuela.

Apartar del fuego y reservar.

A continuación vamos a preparar las albóndigas.

Poner la miga en un bol pequeño o en una taza y añadir leche suficiente para cubrirla. Dejar reposar 10 minutos para que se empape bien.

Poner en un bol la carne picada, el huevo batido como para tortilla y la miga un poco escurrida. Añadir sal, pimienta molida y perejil picado al gusto.

Mezclar bien.

Para formar las albóndigas lo más cómodo es emplear un vaso pequeño, de los de vino. Venden también unas pinzas acabadas en unas cazoletas semiesféricas para formarlas, pero a mí siempre me ha parecido más sencillo lo del vasito, y además no se necesita un cacharro extra en el cajón de la cocina.

Poner un poco de harina en el vaso. Añadir un poco de carne (medio vasito como mucho). Tapar el vaso con la mano y agitar arriba y abajo hasta que tome forma redondita.

Depositar la albóndiga en un plato (se puede espolvorear el plato con un poco de harina para asegurarnos de que no se pega).

Continuar formando las albóndigas de la misma manera hasta terminar con toda la carne. Saldrán unas 20-25, perfecto para 4 raciones.

Poner al fuego una sartén con un par de dedos de aceite, lo justo para cubrir las albóndigas a la mitad.

Cuando se caliente al aceite freír las albóndigas por tandas, dorándolas bien por todos los lados.

Según se vayan haciendo sacarlas de la sartén y ponerlas en la cazuela con la salsa.

Añadir a la cazuela la hoja de laurel, la zanahoria restante si la hemos dejado reservada y agua o caldo hasta que las albóndigas queden casi cubiertas.

Poner la cazuela a fuego medio y cocer tapada unos 30 minutos, dando la vuelta a las albóndigas a la mitad.

Mientras se hacen las albóndigas freír las patatas o preparar la guarnición que vayamos a servir.