Un english muffin es un panecillo inglés redondo, con las caras superior e inferior lisa y que no guarda ninguna relación con el primo americano de las magdalenas, aunque su nombre parezca indicar lo contrario. Los english muffins tienen dos características que los distinguen de otros panes. Estos panecillos no se suelen formar, sino que se cortan con un aro redondo y se cocinan a la plancha, sin necesidad de horno.
Los english muffins se elaboran con una masa ligeramente enriquecida y se suelen comer abiertos por la mitad y tostados. Aunque el relleno de mantequilla y mermelada es el más habitual admiten también rellenos salados. En Estados Unidos por ejemplo se usan como base para los huevos Benedict.
Los english muffins tienen unos primos bastantes curiosos: los crumpets. Son unos panecillos que se elaboran también a la plancha, pero con una masa mucho más líquida, tanto que es necesario un aro para que no se desparrame en la plancha. Tienen un origen muy antiguo (hay referencias a ellos ya en el siglo XIV) y son una especie de cruce entre el pan y las crêpes o tortitas.
Los english muffins se elaboran con una masa muy simple ligeramente enriquecida, casi una masa de pan de molde. Son sencillos de hacer y por sus características unos panecillos curiosos y originales.
Para elaborar los english muffins he seguido la receta de Peter Reinhart en El aprendiz de panadero. La masa es similar a la de otras recetas de muffins, pero la elaboración es un poco peculiar ya que se salta a la torera las características de los muffins, formándolos como bola en vez de cortarlos y metíéndolos un poco por el horno después del paso por la plancha para asegurarse de que queden bien hecho en el interior. De sabor quedan buenísimo y bastaría saltarnos un poco sus instrucciones para obtener unos muffins como mandan los cánones.
- 6 english muffins.
- 300 gramos de harina panadera.
- 210 gramos de leche.
- 15 gramos de mantequilla.
- 9 gramos de azúcar.
- 6 gramos de sal.
- 10 gramos de levadura fresca de panadero.
Poner en un bol todos los ingredientes de la masa. Mezclar con la mano o con una rasqueta o cuchara hasta que se absorba todo el líquido.
Volcar la masa sobre la encimera y comenzar a amasar. Es una masa muy agradable de trabajar. Después de unos minutos de amasado no se pega nada a las manos, pero la hidratación es lo suficientemente alta para que la masa sea blandita y se amase sin esfuerzo. Amasar hasta que esté lisa y brillante.
Formar una bola con la masa y ponerla en un bol. Tapar bien para que no se reseque.
Dejar reposar en un sitio cálido durante una hora y media más o menos. La masa crece bastante rápido y duplicará su volumen.
Para formar los english muffins tenemos dos opciones: Cortarlos con un cortapastas (quien dice cortapastas dice vaso o cualquier otro utensilio redondo y con borde fino), que es una de las particularidades de estos panecillos, o formarlos boleando como se hace habitualmente con otros panes, que aunque no es lo más ortodoxo también salen genial.
Para cortarlos con el cortapastas espolvorear un poco de harina sobre la encimera e volcar la masa sobre ella. Extenderla con ayuda de un rodillo (si se pega se espolvorea un poco de harina sobre la masa) hasta que quede de aproximadamente un centímetro y medio de grosor. Cortar discos con ayuda de un cortapastas de unos 8 centímetros de diámetro. Es buena idea untar el cortapastas con una gotita de aceite o pasarlo por harina para que no se pegue.
Si optamos por el método menos ortodoxo de formarlos haciendo bolas dividir la masa en 6 porciones de unos 90 gramos y forman una bola con cada una, intentado no perder demasiado gas. Yo los he formado así.
Colocar los muffins formados sobre una hoja de papel de horno que habremos espolvoreado con un poco de harina de polenta o harina de trigo.
Tapar con un trapo para que no se resequen y dejar reposar durante una hora o hora y media.
Untar una plancha con una gotita de aceite y ponerla a fuego medio (unos 180 gramos en la plancha eléctrica).
Cuando esté caliente pasar los muffins a la plancha con ayuda de algo que nos permita levantarlos con cuidado (yo he usado la pala de servir antiadherente). En la plancha eléctrica caben los 6 a la vez. En una plancha normal puesta al fuego habrá que hacerlos en tandas.
Si hemos formado los muffins como bolas al ponerlos en la planca se aplanarán un poco, pero eso es lo queremos, para que queden con las dos caras lisas..
Dejar que se hagan durante unos 7 u 8 minutos. La cara inferior se tostará bastante, pero es normal, hay que dejar que se haga así. Si los volvemos antes no se harán del todo por dentro.
Darles la vuelta con cuidado y dejar que se hagan por el otro lado más o menos el mismo tiempo. Al final de la cocción los lados tienen aspecto de cocinado.
Normalmente la elaboración de los muffins finaliza aquí. Sin embargo Reinhart los mete unos minutos al horno para asegurarse de que el interior queda bien hecho (como lo tradicional es tostarlos abiertos antes de comerlo tampoco supone un problema). Se hornearían durante unos 10 minutos a 180 grados. Si los pasamos por la plancha en tandas se van metiendo al horno cuando los retiramos de la plancha, sin esperar a que se hagan todos.
Instrucciones para comerse un English muffin.
Aunque pueda parecer una broma estoy hablando completamente en serio. Para degustar correctamente unos english muffins son necesarias unas pequeñas instrucciones. ¿Como abrimos normalmente un bollito para untarlo con mantequilla y mermelada? Me diréis que empleando un cuchillo, pero esta respuesta aparentemente tan obvia no es correcta en caso de estos panecillos. Porque unos english muffin no se abren empleando un cuchillo. Se abren con un tenedor. Sí, sí, con un tenedor.
Se insertan los dientes en la mitad del panecillo (donde cortaríamos con el cuchillo) y se mueven un poco arriba y abajo. Se pincha a lo largo de todo el contorno con el tenedor y luego se abren con los dedos por los agujeros que quedan.
Se esta forma se crean una serie de crestas y valles (o nooks and crannies como dicen los ingleses) en la zona abierta del panecillo que quedan bien rellenos de mantequilla y mermelada al untarlos y que son otra de las señas de identidad de un english muffin.
No es imprescindible abrirlos con un tenedor, pero resulta gracioso.
Lo abramos con cuchillo o con tenedor ya sólo nos queda tostar un poco el muffin, untarlo con mantequilla y mermelada en abundancia, cerrarlo y disfrutar de él.
Esta receta la he compartido también en Yeastpotting.
Ahora mismo me comería uno de esos para desayunar uhmmm. Que pinta! Un besote!
ResponderEliminarAnda que no estan ricos ni na! Ahora mismo me comía unos cuantos! Un besoo
ResponderEliminarTe han quedado preciosos y súpertiernos. Me han encantado la receta, la presentación y las fotos. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminar¡Un saludo!