Bizcocho de leche condensada

El bizcocho de leche condensada es un clásico que aparece en la mayoría de los recetarios de leche condensada. Se trata de un bizcocho muy tierno y esponjoso y con un sabor muy rico. Es un bizcocho ligero, aunque pueda parecer que con la cantidad de leche condensada que lleva va a quedar un bizcocho un poco pesado. Tampoco es un bizcocho excesivamente dulce a pesar de lo que podamos pensar al principio. Hay que tener en cuenta que en el bizcocho de yogurt se añaden 240 gramos de azúcar para una cantidad de masa similar, mientras que en este no se añade nada de azúcar adicional, únicamente la que lleva la leche condensada. Además es sencillísimo de hacer.

Ingredientes

• 6-8 personas.

• 400 gramos de leche condensada (una lata pequeña).
• 4 huevos.
• 150 gramos de harina.
• 50 gramos de mantequilla.
• 1 sobre de levadura Royal.
• Azúcar glass para recubrir (opcional).

Preparación

Poner la leche condensada en un bol. Añadir los huevos de uno en uno batiendo hasta que quede completamente integrado antes de incorporar el siguiente.

Añadir la mantequilla fundida y enfriada. Yo la suelo fundir en el microondas. Mezclar bien.

Mezclar en un recipiente la harina y la levadura. Tamizar sobre la mezcla anterior, removiendo con cuidado con una espátula hasta que toda la harina quede completamente integrada.

Verter en un molde engrasado y enharinado. Yo he empleado un molde de corona, pero podemos emplear la forma que más nos guste: redondo, un molde alargado de cake. Yo en esta ocasión me ha parecido que había poca cantidad de masa para emplear el molde redondo, de forma que he decidido usar el molde de corona (es un mismo molde que tiene los dos fondos, para hacer el bizcocho redondo o de corona).

Mientras preparamos la masa del bizcocho precalentamos el horno a 180ºC.

Poner el molde en el horno a media altura. Yo inicialmente pongo calor sólo por abajo, para que tarde más en formarse la capa crujiente en la parte superior y de esta forma suba más. A los 15 minutos lo cambio y lo pongo con calor arriba y abajo. Tardará a hornearse entre 30 y 40 minutos. Para vez si está hecho clavamos una aguja de hacer punto (o cualquier otro objeto con punta) en el centro. Si sale seca el bizcocho está hecho. Si está húmeda hornearlo un poco más.

El corte tiene este aspecto tan esponjoso.

Si se desea se puede espolvorear la superficie con azúcar glass en el momento de servirlo. No añadas el azúcar con demasiada antelación porque el bizcocho absorberá el azúcar y desaparecerá.