Me encantan los espárragos verdes, después de las alcachofas son sin duda mi verdura preferida. Así que os podéis imaginar lo feliz que soy en primavera con la abundancia de estas dos verduras. Los espárragos verdes son muy socorridos en todo tipo de tortillas y revueltos. Me gusta mucho esta tortilla de espárragos con queso crema cuando quiero preparar algo rápido y rico sin complicarme mucho la vida. Acompañada de una ensalada tenemos una comida completa en pocos minutos.
Suelo preparar esta tortilla en formato individual. Me parece una opción estupenda para preparar algo sencillo y rico el día que estás solo en casa a la hora de comer. O el día que haces para comer algo que sabes que no le gusta mucho a alguien de la familia. Se puede adaptar fácilmente para perpararla en formato familiar simplemenet multiplicando los ingredientes. Para compartir para 4 queda bien con un manojo de espárragos y 6 huevos.
Habitualmente la preparo con queso crema, la tortilla queda muy jugosa y suave de sabor. Si preferís un sabor un poco más marcado y os gusta el queso de cabra queda estupenda también preparada con queso de cabra bien desmenuzado.
- 1 persona.
- 4-6 espárragos verdes (según sean de gruesos).
- 2 huevos.
- Una cucharada de queso crema. Unos 20 gramos. Puede emplearse queso de cabra en su lugar.
- Sal y pimienta negra molida.
- Aceite de oliva virgen extra.
Eliminar la parte leñosa del tallo de los espárragos.
Patirlos en trocitos. Yo si son gruesos los parto en trozos de medio centímetro o así, si son finitos un poco más grande, hasta un par de centímetros.
Poner una sartén al fuego con un chorro de aceite.
Añadir los espárragos, bajar el fuego y saltear hasta que al pinchar con un tenedor estén tiernos.
Apartar del fuego y reservar.
Batir los huevos como para tortilla.
Añadir sal y pimienta negra molida, el queso crema y los espárragos salteados y mezclar bien. Si en vez de queso crema uso queso de cabra prefiero desmenuzarlo y añadirlo una vez que pongo la mezcla en la sartén.
Si se quiere una tortilla muy esponjosa se pueden separar las claras y las yemas. En este caso batir las claras con un pellizco de sal hasta que estén muy espumosas, no hace falta que sea un punto de nieve tan marcado como cuando hacemos repostería. Por otro lado se baten las yemas y se mezclan con el resto de ingredientes como se ha indicado anteriormente. Por último se añaden las claras montadas y se mezcla con suavidad, intentando que no pierdan mucho volumen.
Poner al fuego una sartén con una gota de aceite en el fondo.
Verter la mezcla de la tortilla en la sartén.
Dejar que se cuaje el fondo a fuego medio.
Cuando la base esté cuajada doblar la tortilla por la mitad con ayuda de una espumadera.
Pasados un par de minutos darle la vuelta para que se haga por los dos lados.
Pasar la tortilla a un plato y servir inmediatamente.
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