Me encanta el flan de huevo, es uno de mis postres favoritos como se puede ver claramente por la amplia variedad de flanes que tengo publicados. Como lo preparo muy a menudo intento buscar siempre alguna variación en la receta. Una de las más fáciles es este flan de café, con la cremosidad de un buen flan de huevo y todo el sabor del café.
¿Qué café emplear para el flan de café? A mí me gusta preparar este flan empleando café soluble. Al no necesitar agua el flan no pierde cremosidad. Se podría preparar también con café expresso, procurando hacerlo más bien cargado para añadir todo el sabor sin tener que emplear mucha cantidad de líquido. En este caso restaremos de la leche la cantidad que añadamos de café, de modo que entre la leche y el café expresso sumen siempre medio litro. Si tenéis leche evaporada una solución en este caso es substituir un poco de leche por leche evaporada, de modo que compense la pérdida de cremosidad por el agua, poniendo por ejemplo 300 ml. de leche, 100 ml. de café expresso y 100 ml. de leche evaporada.
En general me gusta preparar los flanes de huevo siempre el día anterior. El tiempo de reposo hace que se termine de cuajar completamente el flan, de modo que aunque salga del horno con el centro un poco temblón pero no del todo sólido termine de hacerse. Con la flanera grande sobre todo es una técnica que funciona muy bien y queda con una textura perfecta, las pequeñas se cuajan completamente en el horno mucho más rápido. Lo dejo sobre la encimera hasta que se enfría totalmente (sin sacarlo del recipiente en el que lo he puesto al Baño María) y luego lo meto en la nevera toda la noche. A mí es un postre que me gusta mucho más cuando está totalmente frío.
- 6 moldes de flan individuales o un molde de flan grande (6-8 raciones).
- 4 huevos.
- 100 gramos de azúcar.
- 500 ml. de leche.
- 2-3 cucharaditas de café soluble (según nos guste el sabor a café más suave o más marcado).
- 4 cucharadas de azúcar para el caramelo (puede sustituirse por caramelo de bote).
- 4 cucharadas de agua para el caramelo.
Separar un poco de leche de la receta (con medio vaso es suficiente) y calentarla.
Añadir el café soluble y remover para que se disuelva bien.
Poner en un bol los huevos y batirlos como para tortilla. No batir en exceso para que no hagan espuma.
Añadir los 100 gramos de azúcar y la leche (primero la fría y luego la que hemos calentado para disolver el café).
Batir para mezclar homogéneamente y que se disuelva el azúcar.
Para preparar el caramelo poner en un cazo las 4 cucharadas de azúcar y 4 cucharadas de agua. Se pueden añadir unas gotas de zumo de limón para ayudar a que no cristalice.
Cocinar hasta que el caramelo adquiera un color dorado. No remover cuando empiece a calentarse porque forma cristales, aunque se puede mover un poco el cazo si es necesario para ayudar a disolver el azúcar. Retirar del fuego en cuanto comience a coger color tostado para evitar que se queme, ya que entonces adquiere un sabor amargo no muy agradable.
Verter el caramelo en 6 flaneritas individuales o en una flanera grande.
Mover con cuidado cada molde antes de que solidifique para que el caramelo cubra todo el fondo y el inicio de las paredes.
Se puede sustituir este caramelo por caramelo comercial. Es más rápido aunque en mi opinión el sabor no es igual.
Verter la mezcla de leche y huevos en los moldes caramelizados.
El flan se cuece al Baño María. Para ello colocaremos los moldes dentro de otro recipiente más grande en el que quepan todos. Una vez que pongamos los moldes añadir 2 o 3 dedos de agua en el recipiente exterior, teniendo en cuenta que no debería sobrepasar la mitad de la altura de los moldes del flan para evitar que entre agua cuando hierva. Se puede usar cualquier fuente de horno, mejor si es ligera para que no pese demasiado al llenarla de agua y poner los flanes. Yo he encontré hace unos meses un molde de bizcocho grandecito que no usaba porque no es desmontable y me viene genial para estas preparaciones al Baño María.
Precalentar el horno a 180 grados mientras preparamos el flan.
Poner el recipiente con los moldes en la parte central del horno.
Cocer el flan hasta que esté cuajado. Estará listo cuando al tocar con el dedo en el centro del flan se note cuajado pero un poco temblón todavía. Para los flanes individuales necesitará entre 40 y 50 minutos, para el molde grande puede llegar a una hora.
Sacar los flanes del horno y dejar enfriar antes de servir.
Para desmoldar los flanes pasar un cuchillo de punta roma todo alrededor para separarlo del molde. Poner un plato invertido sobre el molde y dar la vuelta. Si no cae darle un meneo seco, de arriba a abajo para que se desprenda.
Servir el flan con el caramelo del molde.
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