Cuando pensamos en mermelada normalmente nos vienen a la cabeza recetas elaboradas con frutas, pero hay algunas verduras y hortalizas que también nos permiten hacer unas mermeladas deliciosas, como la mermelada de tomate, una de las recetas más populares del blog, o esta mermelada de pimientos rojos, simplemente deliciosa.
Esta mermelada de pimientos rojos tiene un sabor delicioso y podemos emplearla en un sinfín de recetas. Su color rojo intenso y brillante hace además que la presentación sea muy vistosa. Algunas sugerencia de uso para esta mermelada:
- En tostadas, como cualquier mermelada de frutas. Simplemente deliciosa.
- Como acompañamiento de carnes, sobre todo hechas a la plancha o la brasa. Me gusta especialmente con el lomo y el solomillo de cerdo, una carne a la que siempre le va genial cualquier acompañamiento con un toque dulzón.
- En aliños. Si añadimos una cucharadita de mermelada a una salsa vinagreta obtendremos un aliño delicioso para las ensaladas.
- En tostas, entrantes y aperitivos. Probablemente uno de los usos más habituales de la mermelada de pimientos rojos. Es un acompañamiento perfecto para los quesos. Son muy populares las tostas de queso crema cubierto con mermelada de pimientos, un entrante rico y bonito, pero a mí personalmente me gusta más acompañando a quesos más fuertes, como estas tostas con queso Camembert que veis en las fotos. Para prepararlas fundo ligeramente con el soplete de cocina las cuñas de Camembert (para mí este es un queso que pide a gritos un toque de calor que lo funda un poco) ya colocadas sobre las rebanadas de pan tostado y las cubro de mermelada. Podéis cambiar el queso crema o el Camembert por el queso que más os guste.
Por su elevado contenido en azúcar la mermelada se conserva en buen estado durante un largo tiempo. Basta con poner los botes recién llenados y todavía calientes boca abajo para que hagan vacío y guardarlos en la nevera. Pero si queréis asegurar una larga conservación lo mejor es esterilizar los botes al baño María. Para ello ponemos los frascos cerrados en la olla completamente cubiertos de agua y los cocemos unos 20 minutos a máxima potencia. Para evitar que se rompan al chocar entre sí se pueden envolver en trapos de cocina viejos. Retirar del fuego y dejar que se enfríen lentamente en la olla antes de sacarlos. Con este procedimiento nos durarán fuera de la nevera muchos, muchos meses.
A la hora de comprar los pimientos elegid aquellos que parezcan pesados. Con un quilo de pimientos rojos (3 pimientos hermosos) salen 3 frascos de mermelada.
- 3 tarros de mermelada.
- Un kilo de pimientos rojos (3 pimientos hermosos más o menos).
- 500 gramos de azúcar (la mitad de peso de los pimientos limpios).
- 50 ml. de vinagre de vino blanco o manzana (un vinagre suave).
- 50 ml de agua.
Lavar los pimientos para eliminar el polvillo que suelen tener.
Abrirlos y eliminar el pedúnculo, las semillas y los nervios interiores.
Partirlos en trozos pequeños.
Pesar los pimientos ya limpios. Tres pimientos grandes pesan alrededor de un kilo.
La mermelada lleva la mitad de peso de azúcar que de pimiento limpio (alrededor de 500 gramos en este caso). Pesar la cantidad de azúcar necesaria en un recipiente aparte.
Poner en una cazuela amplia el pimiento troceado, el azúcar, el agua y el vinagre.
Poner la cazuela a fuego fuerte, removiendo a menudo hasta que se disuelva el azúcar. Cuando comience a hervir bajar un poco el fuego, dejándolo a media potencia de modo que se mantenga el chup-chup, pero sin hervir muy fuerte.
Cocer la mermelada hasta que el pimiento esté muy blandito, llevará unos 30 minutos.
Triturar bien la mermelada con la batidora. Si queremos que quede extrafina se puede pasar por un colador para eliminar cualquier resto de pielecillas que no se hayan triturado, pero simplemente con la batidora queda con una textura superlisa.
Mientras se cuece la mermelada lavar los frascos y las tapas con agua muy caliente. Con esta cantidad salen tres frascos de los normales de mermelada.
Verter la mermelada caliente en los frascos, llenándolos casi hasta el borde y cerrarlos bien.
Ya solo nos queda disfrutas de esta deliciosa mermelada.
Se ve muy rica :)
ResponderEliminarYo hago pocas mermeladas (en casa apenas las comemos) pero reconozco que me llaman mucho la atención las no frutales: tomate, pimiento, etc.
La que si he hecho más de una vez es la de zanahoria, ¡me encanta como relleno de pasteles!