Tortitas (Pancakes)

Las tortitas son pequeños pastelitos normalmente finos y redondos preparados con una masa a base de leche, huevos y harina y que se cocinan en una sartén o plancha caliente. Su nombre en inglés, pancakes, resume sus características, ya que significa literalmente algo similar a pastel de sartén. Son parientes de las filloas gallegas y las crêpes francesas, aunque las tortitas son más gorditas y normalmente de menor tamaño. Al llevar levadura son también más esponjosas. Pueden servirse acompañadas de multitud de ingredientes: sirope, miel, chocolate, mantequilla, mermelada, fruta, etc. Son sencillísimas y bastante rápidas de preparar para un desayuno o la merienda.

Aunque normalmente las asociamos con Estados Unidos, ya que es a través de los desayunos de series y películas americanas como se han popularizado, las tortitas tal proceden de las islas británicas, aunque en el Reino Unido normalmente se preparan sin añadir levadura a la masa.

En el Reino Unido es tradición comer las tortitas o pancakes hoy martes de carnaval, o Shrove Tuesday (martes de penitencia) para los ingleses. Las tortitas están tan asociadas con este día que popularmente también se le demina pancake day o día de la tortita. Como curiosidad señalar que en Galicia las filloas son también muy típicas durante la época de Carnaval.

La tradición de comer tortitas tortitas el martes de Carnaval es muy antigua. El martes de carnaval es el último día antes de la cuaresma, que comenzará mañana con el Miércoles de Ceniza. Este último día de vida mundana se celebraba comiendo en abundancia antes de que comiencen los ayunos de la Cuaresma.

Al igual que otras tradiciones cristianas puede tener su origen en titos paganos muy anteriores al cristianismo, y podría estar relacionada con fiestas que celebraban el derrota del invierno y la llegada de la primavera y el buen tiempo. Loas tortitas, redondas y doradas, serían aquí pequeños soles.

Para preparar las tortitas sigo la receta de Simone Ortega en 1080 recetas de cocina. Sigo muchos blog americanos y todos ellos tienen numerosas recetas de tortitas, pero para la receta básica siempre vuelvo a la de Simone Ortega. Le tengo mucho cariño porque es la primera receta de tortiras que hice (bueno, en general le tengo mucho cariño al libro completo, aunque ahora no lo use tanto) y como además salen estupendas tampoco tengo una razón para cambiar de receta. La única peculiaridad de la receta es que emplea aceite en vez de mantequilla fundida que es lo habitual en las recetas americanas. Yo la suelo sustituir por mantequilla fundida.

Ingredientes

• 200 gramos de harina.
• 1 cucharadita de sal.
• 3 cucharaditas de levadura de repostería.
• 1 cucharada sopera de azúcar.
• 1 cucharada sopera de aceite de oliva (o 20 gramos de mantequilla derretida).
• 2 huevos.
• Un vaso (250 ml.) de leche.
• Aceite para engrasar la sartén.

Preparación

Poner en un recipiente la harina, la sal y la levadura. Remover un poco para que se mezclen bien.

Batir los huevos en otro recipiente. Añadir el aceite (o la mantequilla fundida) y la leche. Batir hasta mezclarlo.

Hacer un pozo en el centro de la harina y verter la mezcla de huevos y leche. Batir hasta que se mezcle, pero sin batir demasiado para evitar que las tortitas salgan correosas. No importa que queden algunos grumos, se desharán al fuego.

Poner al fuego la sartén en la que vamos a preparar las tortitas. Yo inicialmente la unto con una gotita de aceite que distribuyo en una capa muy fina con un pincel de cocina y no la vuelvo a untar, ya que sé que no se pega. Si es necesario se puede untar un poquito de aceite antes de hacer cada tortita, distribuyéndolo bien con un pincel o un poco de papel de cocina. La temperatura no tiene que ser demasiado fuerte par aque de tiempo a que se haga la tortira sin quemarse. Yo inicialmente caliente bien la sartén y luego la pongo a temperatura media (5 sobre 9). También se puede usar la plancha eléctrica. En este caso la pondríamos a unos 180 grados.

Con ayuda de un cazo verter un poco de masa en la cazuela, hasta obtener un círculo del tamaño deseado. No se pone el cazo entero, yo pongo algo menos de la mitad por tortita. A diferencia del las crêpes no hace falta que llene toda la superficie de la sartén.

Cuando la superficie de la tortita se llene de pequeñas burbujas es el momento de darle la vuelta. Con ayuda de una espumadera la levantamos de la sartén y la dejamos caer del otro lado. Cocinar hasta que el otro lado esté también dorado y sacar de la sartén. Iremos apilando las tortitas en un plato, que podemos cubrir de papel de aluminio para que conserven el calor. La primera tortita, al igual que ocurre con las crêpes suele quedar un poco más fea, hasta que coge bien el punto a la temperatura de la sartén y la cantidad de masa. Si necesitamos que queden bonitas de presentación (por ejemplo si hemos invitado a alguien a merendar) la apartamos, si las vamos a comer más en familia yo la añado al plato.

La verdad es que según vamos avanzando cada vez quedan más bonitas, da pena que se acabe la masa precisamente cuando más bonitas quedan.

Continuar haciendo tortitas de la misma forma hasta acabar con la masa.

Servirlas inmediatamente, acompañadas de sirope, mantequilla, mermelada, nata, etc.