Estas rocas de chocolate y almendra caramelizada son un capricho irresistible para los que como yo seáis amantes del chocolate. Son unos bombones sencillísimos de preparar y resultan deliciosos con la almendra caramelizada crujiente cubierta de chocolate. Su único secreto, emplear almendras y chocolate de calidad. Son perfectos para servirlos al final de una comida junto con el café.
Bien ordenaditos en un caja mona son también un detalle muy bonito para regalar.
Yo los preparo con chocolate negro de cobertura, pero pueden elaborarse con cualquier chocolate que nos guste. Puede emplearse perfectamente chocolate con leche e incluso chocolate blanco.
Para esta receta generalmente se emplean almendras partidas en tiras. Yo no he conseguido encontrar almendras partidas así en ningún sitio. Tenemos en este caso dos opciones. Partir nosotros mismos las almendras crudas enteras empleando un cuchillo o buscar otro formato que venga bien para realizar los bombones. Yo he sustituido las barritas por almendra cortada en cuadritos, que es un formato fácil de encontrar en la mayoría de supermercados.
La receta está basada en la que indica el gran Paco Torreblanca en La cocina dulce. Toda una garantía para que la receta será un éxito.
- 30 bombones aproximadamente.
- 250 gramos de almendra cruda partida en barritas o cubitos.
- 200 gramos de chocolate de cobertura.
- 100 gramos de azúcar.
- 25 gramos de mantequilla.
Disponer sobre la encimera una hoja de papel de horno antiadherente o una lámina tipo Silpat de las que se usan para el horno para extender las almendras caramelizadas sobre ella. Si la hoja de papel de horno se curva y no se mantiene estirada sujetarla poniendo algo de peso en las esquinas.
Poner las almendras en barritas o cubitos en una sartén sin nada de aceite y ponerla al fuego. Dejar que se tuesten durante unos 5 minutos, removiendo constantemente para que se tuesten todas por igual y no se quemen las del fondo. Cuando estén doradas por igual aunque no hayan pasado los 5 minutos apartar del fuego y reservar.
Para preparar el caramelo poner al fuego una sartén o cazo con la mitad del azúcar. Cuando se funda añadir la otra mitad del azúcar. Dejar cocer hasta que se forme un caramelo rubio.
Añadir las almendras tostadas, que estarán todavía tibias, al caramelo y remover con una cuchara de madera o una espátula para recubrirlas de forma uniforme con el caramelo. Cocinar durante un minutos sin parar de remover.
Extender las almendras caramelizadas sobre la hoja de papel de horno, procurando que queden bien extendidas y no se formen bloques grandes. Si algunas quedan un poco amontonadas se pueden separar con facilidad cuando se enfríen con ayuda del mazo del mortero, pasando un rodillo por encima o simplemente con los dedos. ¡Ojo! Cuando se enfríen. No se os ocurra tocar las almendras caramelizadas mientras están calientes ya que el caramelo quema mucho. Es de las peores quemaduras en cocina, peor que la del aceite caliente.
Partir el chocolate en trocitos y ponerlo en un recipiente que pueda ir al micro. Programar inicialmente 3 minutos a baja potencia (descongelación o un pelín más alta, pero no mucho más). Sacar el chocolate del micro y remover bien con una cuchara de madera o una espátula. Si todavía faltan trozos por fundir ir programando tiempos de 30 segundos (si hay trozos grandes) o 15 segundos (si quedan trocitos pequeños sin derretir) y removiendo bien al final de cada uno hasta que esté completamente fundido.
El chocolate también puede fundirse al Baño María empleando el método tradicional.
Añadir la mantequilla al chocolate fundido y remover bien hasta que esté completamente integrada.
Incorporar las almendras caramelizadas al chocolate fundido y remover bien hasta que todas las almendras estén bien cubiertas por el chocolate.
Con ayuda de dos cucharas formar montoncitos sobre una lámina de papel de horno o un Silpat (podemos reutilizar el que hemos empleado para extender las almendras). Los montoncitos no tienes por qué ser iguales, de hecho parte de la gracia de los bombones es que sean tan irregulares y diferentes entre sí.
Saldrán unas 30 piezas.
Si durante el formado el chocolate se enfría (y solidifica) dificultando la tarea se puede volver a calentar poniéndolo de nuevo unos segundos en el micro o al baño María, vigilándolo bien porque con el caramelo cogerá temperatura enseguida.
Dejar que se enfríen bien las rocas. En esta época solidifican bien sobre la encimera. Si hace calor es preferible colocarlas en la nevera hasta que solidifiquen del todo.
Para almacenarlas las guardaremos en la nevera en un recipiente hermético, colocando papel antiadherente entre las capas de bombones.
Comentarios
Publicar un comentario