Las espinacas a la catalana, son un plato muy típico de la gastronomía española, especialmente en Cataluña, de donde es originaria la receta. Una de las muchas recetas que combinan frutos secos con carnes o verduras para crear combinaciones exquisitas y muy sabrosas.
Aunque la receta original lleva únicamente espinacas, pasas y piñones yo suelo añadirles un poco de bacon para hacer el plato un poco más contundente.
Las espinacas preparadas de esta forma son un primer plato estupendo. Además pueden emplearse como relleno de canelones, lasañas, empanadas, tortillas o para preparar sabrosas quiches y tartas saladas.
- 4 personas.
- 600 gramos de espinacas. Yo he usado frescas, de las que venden en bolsas junto a las ensaladas, pero pueden emplearse espinacas congeladas
- Un puñado de pasas.
- Una cucharada de piñones.
- 4 lonchas de bacon (opcional).
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal y pimienta.
Yo cuando empleo espinacas frescas como en esta ocasión no suelo cocerlas previamente. Simplemente las pongo crudas a rehogar en la sartén con el aceite y las dejo un poquito más hasta que están bien cocinadas. A mí personalmente me gustan más así. Simplemente rehogadas quedan bien cocidas y blanditas y evitamos añadir nada de agua de cocción a la sartén, ya que por mucho que se escurran las espinacas siempre mantienen algo del agua de la coción.
Si te gusta más cocerlas puede hacerse sin ningún problema. Poner al fuego una olla con agua. Cuando comience a hervir añadir las espinacas (si son congeladas no hace falta descongelars previamente) y dejar cocer durante 10 minutos. Escurrir muy bien para que pierdan todo el agua.
Poner una sartén al fuego con un choro de aceite en el fondo. Ponemos poquito para evitar que el plato quede graso, ya que el bacon soltará bastante grasa al freirse.
Si vamos a usar el bacon mientras se caliente el aceite lo cortamos en trozos pequeños.
Poner el bacon en la sartén y dejar que se cocine. Cuando esté hecho añadir las espinacas, las pasas y los piñones. Dar vueltas de en cuando para que se rehogue todo por igual. Si ponemos las espinacas crudas en la sartén inicialmente ocuparán mucho (parece que no caben). En cuanto comiencen a cocinarse y a perder agua su tamaño se reducirá nobablemente. Salpimentar al gusto.
Distribuir en platos de presentación y servir.
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