Hace unos meses me encontré en varios sitios estos medallones de patata y brócoli o pastelitos de patata y brócoli y me parecieron una idea estupenda para añadir verdura en los menús de una forma muy original. Desde entonces los he preparado varias veces y son siempre un éxito. Los suelo servir siempre como guarnición, pero valdrían también para un primer plato de verdura. Por lo que he visto después están basados en los que venden en Ikea congelados, pero prepararlos en casa es supersencillo y siempre serán más saludables.
Para preparar los medallones de patata y brócoli las verduras se pican muy menudas y primero se pasan unos minutos por el microondas para ablandarlas. Mientras tanto se pochan un poco de cebolla y puerro a los que añadiremos las verduras y una generosa cantidad de queso antes de ponerlo en el un molde de magdalenas y meterlo en el horno para que se termine de hacer.
El microondas me gusta mucho para cocer verduras. Permite cocerlas en pocos minutos y teniendo un poco de cuidado para no excedernos con los tiempo quedan estupendas, como si las cociéramos al vapor. En mi opinión es preferible no cocerlas al 100% de potencia (yo la verdad es que no uso la potencia al 100% más que para hervir agua para hacer infusiones), las potencias inferiores tratan con más delicadeza los alimentos, aunque necesiten algún minuto más de cocción, siempre dentro de los tiempos cortos que requiere el microondas. Es siempre preferible programar tiempos cortos y si vemos que todavía no está listo añadir algún minuto más, si nos pasamos con el tiempo las verduras se resecan con facilidad y ya no tiene arreglo. Y recordad siempre el tiempo de reposo con el micro apagado. Cuando la verdura está casi en su punto muchas veces es suficiente con dejarla unos minutos dentro del micro apagado para que termine de hacerse con el calor acumulado.
Si nos os convence lo de cocer la verdura en el microondas se puede cocer también al vapor (la alternativa más aconsejable) o en una cazuela con agua, asegurándonos de escurrirlo muy bien. En caso de cocerlo con agua pienso (no lo he probado) que quedaría mejor si se cuecen las patatas en trozos y los ramilletes sin trocear y se pica todo finito una vez cocido.
Los medallones de patata y brócoli se hacen en el horno distribuyendo las porciones en un molde de magdalenas. Si no tenemos podemos emplear unos moldes individuales de flan o incluso se podría emplear una fuente de horno, cociéndolo todo en una pieza y partiendo luego las porciones.
Se conservan bien un par de días en la nevera y quedan bien después de recalentarlos.
- 4 personas (8-10 medallones).
- 250 gramos de brócoli (ramilletes en su mayor parte, con poco tallo).
- 2 patatas medianas (unos 500 gramos).
- Una cebolla mediana.
- La parte blanca de un puerro.
- 100 gramos de queso rayado (yo uso Emmental).
- 3 cucharadas de nata o de leche.
- Sal y pimienta negra molida.
- Aceite de oliva virgen extra.
Partir el brócoli en trocitos muy menudos.
Pelar las patatas y rallarlas empleando la parte de agujeros gruesos del rallador.
Poner la patata y el brócoli en un bol y poner en el microondas. Cocinar hasta que estén tiernos. En mi micro con la potencia al 75% los he puesto 3 minutos más 2 minutos más otros 2 minutos, en total 7 minutos con algún descanso entre intervalos. Si cocinamos al 100% de potencia necesitarán menos tiempo, obviamente, pero como he comentado a mi me gusta más como queda la verdura cuando se hace a una potencia un poco más baja.
También se puede cocer al vapor o en una cazuela con agua, asegurándonos de escurrirlo muy bien.
Mientras que hacemos la verdura en el microondas partir la cebolla en cuadritos pequeños y el puerro en aritos o en medios aritos.
Poner al fuego una sartén amplia con un chorro de aceite en el fondo.
Añadir la cebolla y el puerro y pochar hasta que se empiecen a poner transparentes, unos 10 minutos.
Incorporar la patata y el brócoli.
Añadir sal y pimienta negra molida al gusto.
Saltear 4 o 5 minutos removiendo con frecuencia.
Apartar del fuego.
Añadir el queso y remover bien para que se distribuya por igual. Si queda muy espeso se pueden añadir 2 o 3 cucharaditas de nata o de leche.
Para hornear los medallones vamos a emplear una bandeja de magdalenas. Si no tenemos se pueden emplear moldes de magdalenas de silicona (los de papel no van a aguantar el peso de la masa) o unas flaneras individuales de metal. En caso de no tener moldes individuales aparentes se podría extender en una fuente y hornear en bloque, partiéndolo al servir.
Pintar con ayuda de un pincel el interior de los huecos (o el molde que usemos) con un poco de aceite de oliva.
Distribuir la mezcla preparada entre los moldes. En el caso de los moldes de magdalena los llenaremos hasta el borde. No se llenarán todos los huecos, dependiendo de lo que los llenemos saldrán entre 8 y 10.
Mientras preparamos el molde precalentar el horno a 180 grados.
Colocar el molde en la parte central y hornear unos 20 minutos, hasta que estén doraditos.
Sacar del horno. Dejar reposar un par de minutos y sacarlos con cuidado del molde.
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