Bizcocho de manzana alemán

El bizcocho alemán de manzana (dutch apple cake) es un bizcocho muy jugoso y húmedo, con capas de manzana recubiertas de azúcar y canela intercaladas con capas de esponjoso bizcocho. Un bizcocho fantástico para los que como yo seáis amantes de los postres con manzana y la canela.

Este bizcocho se denomina muchas veces también bizcocho judío de manzana (jewish apple cake). Por lo que leí en su día el bizcocho no tiene origen en la cocina judía, más bien es típico de Filadelfia y el resto del estado de Pensilvania. El nombre parece proceder del hecho de que el bizcocho se elabore con aceite y no con mantequilla, algo que nos es muy habitual en la repostería americana. Al no llevar lácteos el bizcocho podría servirse perfectamente al final de una comida judía que incorpore carne, ya que permitiría respetar la prohibición de no mezclar carne y leche.

Las cantidades de la receta original están en tazas (una taza americana son unos 240 ml). En la receta indico las cantidades también en gramos. A mí me parece más cómodo y preciso, sobre todo porque aquí tampoco es tan frecuente tener una taza de la medida adecuada. Si os gustan las medidas de volumen es muy útil comprarse un juego de tazas medidoras. Así nos aseguramos siempre de que tienen la capacidad adecuada.

He reducido bastante la cantidad de azúcar de la receta original. La receta pedía 2 tazas de azúcar (unos 480 gramos) para la masa más otras 5 cucharadas (alguna receta he visto con otra taza entera aquí) para cubrir las láminas de manzana. ¡Más de 550 gramos! Me parece una cantidad un poco excesiva, y eso que yo soy muy golosa. En general la cantidad de azúcar de la mayoría de los bizcochos americanos me parece bastante elevada, suele ser muy superior a la que llevan las recetas europeas. He reducido la cantidad total de azúcar hasta la taza y media, unos 360 gramos, aproximadamente el mismo peso de azúcar que de harina. Si esa proporción funciona bien en el bizcocho cuatro cuartos en general debería dar buen resultado en cualquier bizcocho, sobre todo teniendo en cuenta la cantidad de manzana que lleva este bizcocho, que le aporta también dulzor extra. Con esta cantidad para mi gusto queda riquísimo de sabor pero no es empalagoso.

Con esta receta sale un bizcocho grande, hermoso, alemán que es él. Si comparáis las cantidades con la de este otro bizcocho de manzana veréis que las de esa receta son bastante más elevadas. Sale un bizcocho hermosote.

El bizcocho es muy húmedo, muy jugoso. Esto es muy rico para comer, pero en verano es un poco peligroso, porque nos arriesgamos a que el bizcocho, o más bien las capas de manzana, fermente. Para evitarlo en verano lo podemos meter a la nevera bien envuelto en papel de film. A los bizcochos no les sienta bien la nevera, pero este al ser de por sí tan húmedo aguanta bien.

Tal y como está la receta sale un bizcocho genial, pero si queremos un bizcocho totalmente espectacular se pueden añadir unas nueces picadas sobre las dos capas de manzana inferiores.

Para esta cantidad de masa hace falta un molde redondo de 24-26 centímetros. Habitualmente lo hago en el molde redondo, pero esta vez decidí hacerlo en el molde de corona, un poco influida porque había visto muchas fotos de este bizcocho con esa forma. La verdad es que el bizcocho se coció muy bien en el molde de corona. A este tipo de bizcochos tan densos les va muy bien esta forma, ya que les cuesta un poquito cocerse hasta el centro. El problema es que luego no me atreví a desmoldarlo, tenía miedo de que se rompiera, por eso aparece en las fotos con el molde. Intenté levantarlo poniendo dos espátulas de cocina largas debajo del papel pero me dio miedo que se partiera del todo antes de hacer las fotos y desistí. Si no hubiera querido hacer las fotos a lo mejor había salido bien. Luego después de cortar dos porciones ya pude quitarlo del molde sin problema. Eso sí, lo bien que se coció compensa el no poder delmoldarlo.

Ingredientes

• 6-8 personas.

• 5 o 6 manzanas. Usar preferentemente una variedad que se ablande al cocer, como golden o reineta.
• 3 tazas (360 gramos) de harina.
• 1 1/2 tazas (360 gramos) de azúcar. Puede mezclarse azúcar blanco con azúcar moreno.
• 4 huevos.
• 1 taza (240 ml) de aceite de oliva.
• 1/2 taza (120 ml) de zumo de naranja.
• 1/2 cucharadita de nuez moscada.
• 2 cucharaditas de canela en polvo.
• 1 sobre de levadura de repostería.

Preparación

Poner 75 gramos de azúcar en una fuente amplia. Añadir la canela y mezclar.

Partir las manzanas en cuartos, eliminar el corazón y pelarlas. Partir cada cuarto en láminas y ponerlas en la fuentes con el azúcar y la canela, moviéndolas para que queden recubiertas con el azúcar.

Poner en un bol los huevos y batirlos hasta que estén espumosos. Añadir a continuación el resto del azúcar, el zumo de naranja y el aceite, batiendo bien después de incorporar cada ingrediente.

Añadir la nuez moscada molida y mezclar.

En un recipiente aparte mezclar la harina, la levadura y un pellizco de sal. Mezclar para que la levadura y la sal se distribuyan por igual.

Tamizar la harina sobre la mezcla anterior. Mezclar con una cuchara de madera o una espátula de silicona hasta que no quede harina suelta y la mezcla sea homogénea.

Preparar un molde redondo de 24-26 cm. de diámetro untándolo con un poco de aceite y espolvoreando con harina o forrándolo con papel antiadherente.

Mientras se prepara la masa calentar el horno a 180 grados.

Verter en el molde aproximadamente la tercera parte de la masa.

Distribuir sobre ella una tercera parte de las manzanas laminadas. No hace falta que queden muy ordenadas.

Añadir otro tercio de la masa y otro tercio de las manzanas laminadas, para finalizar con el último tercio de la masa y las láminas de manzana restantes, que esta vez pondremos un poco más ordenadas. En total tendremos 6 capas, 3 de masa y 3 de manzana.

Si en la fuente en la que teníamos las manzanas queda algo de azúcar con canela distribuirlo sobre la última capa de manzana.

Colocar el molde con el bizcocho en la parte central del horno. Hornear durante entre una hora y cuarto y una hora y media, hasta que al insertar un palillo en la zona central salga casi seco. El bizcocho es muy húmedo y jugoso por la cantidad de manzana que lleva, por lo que el palillo siempre saldrá un poco húmedo, pero cuando está hecho se nota perfectamente porque no queda masa cruda adherida al palillo. Yo los 15 primeros minutos horneo con calor sólo abajo y luego ya con calor abajo y arriba.

Sacar el bizcocho del horno cuando esté cocido y dejarlo reposar unos 15 minutos sobre una rejilla.

Desmoldar (si podéis, yo no me he atrevido a sacarlo de la base del molde de corona) y dejar que se enfríe del todo sobre la rejilla.

Acompañado de un café con leche tenemos una merienda perfecta.