Compota de manzana

La compota de manzana en uno de los postres más fáciles de realizar. Si moderamos la cantidad de azúcar que añadimos resulta además un postre muy saludable. Y al ser la manzana bastante digestiva es un buen postre para pequeños y mayores cuando andamos un poco pachuchos. Pero no sólo es un postre delicioso y ligero, sino que es también un acompañamiento perfecto para muchos platos elaborados con carne de cerdo y un relleno muy sabroso para numerosas tartas y empanadillas.

Casi en los inicios del blog publiqué una receta de compota rápida de manzana en microondas. En esta ocasión se trata de la receta clásica cocida al fuego en cazuela. Necesita un poquito más de tiempo de cocción (tampoco mucho, en media hora está lista), pero merece la pena porque las manzanas tienen ese toque inconfundible del azúcar caramelizado.

Para preparar la compota podríamos usar cualquier variedad de manzana, aunque a mí me gusta más emplear variedades que se ablanden fácilmente al cocer. Las que más me gustan en este caso son la golden y la reineta, una variedad que resulta perfecta para cocer porque se cuece muy rápido y se queda muy blandita, deshaciéndose con facilidad. Otras variedades con carne más dura como la Fuji no me gustan mucho para hacer compota. La Fuji por ejemplo me parece una variedad perfecta para comer a mordiscos, porque incluso cuando está muy madura sigue estando muy crujiente, pero al cocerla sigue quedando muy entera. Ese punto crujiente que me gusta tanto al comerla cruda no me resulta agradable en la compota, que me gusta muy blandita.

Yo la aromatizo con canela y limón, pero podéis eliminarlos o sustituirlos por otro ingrediente a vuestro gusto.

A mí me gusta servirla con los trozos enteros, pero si preferís que quede deshecha, casi como un puré, basta con machacarla con un tenedor.

Ingredientes

• 4 personas.

• Un kilo de manzana (a mí las que más me gustan para compota son la golden y la reineta).
• 125 gramos de azúcar.
• 125 ml. de agua.
• Un palito de canela.
• La piel de medio limón (sin nada de parte blanca).

Preparación

Poner el agua y el azúcar en una cazuela a fuego suave hasta que comience a hervir y se haga un almíbar.

Partir en cuartos las manzanas, descorazonarlas y pelarlas. Partirlas en trozos.

Poner los trozos de manzana en la cazuela con el almíbar. Añadir el palito de canela y la corteza de limón.

Dejar cocer a fuego medio durante unos 30 minutos hasta que la manzana esté blandita, removiendo con frecuencia con una cuchara de madera para que se hagan todas por igual. El tiempo necesario dependerá de la variedad de manzana (la reineta por ejemplo tarda algo menos de tiempo a cocerse) y de si nos gusta que los trozos de fruta queden enteros o se deshagan con facilidad.

Retirar del fuego y quitar la ramita de canela y las cortezas de limón.

Servir templada o fría sola o como acompañamiento de otros postres.