Pimientos asados

Pimitneos asados

Me encantan los pimientos asados. Me gustan especialmente en ensalada, pero son también una guarnición deliciosa para casi todos los platos de carne o pescado.

En casa de mis padres se siguen asando en horno de leña, con lo que quedan absolutamente perfectos. En el horno eléctrico se consigue también un resultado fantástico. De hecho yo alguna vez llegué a asarlos en un recipiente cerrado en el microondas y el resultado es bastante aceptable.

Podemos emplear los pimientos asados en distintas preparaciones

Ensalada
La ensalada hecha exclusivamente con pimientos asados es mi preferida. En casa de mis padres sigue siendo costumbre hacer ensalada a la hora de la comida y ponerla en el centro de la mesa para que todo el mundo vaya pinchando, así que es un plato frecuente en invierno.
Para hacer la ensalada simplemente poner los pimientos en un plato hondo y preparar un aliño con aceite de oliva virgen extra, vinagre (a mí me gusta el de Módena), un pellizco de sal y un poco del jugo de asar los pimientos que hemos guardado. Es conveniente tener a mano bastante pan para mojar porque el aliño de esta ensalada es simplemente delicioso.
Ensalada de ventresca
Los pimientos asados quedan también de lujo combinados en ensalada con ventresca en conserva. Podemos añadir también huevo cocido, aceitunas o anchoas. Aliñar con aceite de oliva virgen extra, vinagre, sal y caldillo de asar los pimientos. La va muy bien también una puntita de mostaza.
Tostas
Necesitamos rebanadas de un pan bastante consistente para que aguante la humedad. También se puede tostar para que no se deshaga tan fácilmente. Ponemos sobre el pan tiras de pimiento asado hasta cubrirlo. Añadimos un chorro de aceite de oliva virgen extra y si el pan lo aguanta un poco de caldillo de asarlos. Si nos gusta se puede poner encima una anchoa, aceitunas, etc.
Guarnición
Los pimientos asados constituyen una guarnición estupenda para cualquier plato de carne o pescado que no lleve caldo. Simplemente añadirlos al plato y a disfrutar.


Ingredientes
  • Pimientos rojos de tipo lamuyo (los rojos gordos de siempre). Merece la pena hacer de una vez todos los que quepan en la fuente de horno que vayas a emplear o en la bandeja del horno. Ahora es fácil encontrar en el mercado pimientos lamuyo amarillos y verdes (no confundir con los italianos habituales que son delgados). Pueden combinarse los tres tipos para obtener un plato más colorista. Yo he empleado 4 pimientos rojos que han pesado casi un kilo y medio.
  • Aceite de oliva virgen extra.

Pimitneos asados
Preparación

Lavar los pimientos bajo el chorro de agua para eliminar el polvillo que suelen tener.

Poner los pimientos en una fuente de horno o directamente sobre la bandeja de horno. Yo no suelo cocinar nada directamente sobre la bandeja del horno, pero se puede hacer perfectamente. Si vamos alternando los rabillos de los pimientos uno en cada dirección se aprovecha mejor el espacio.

Untar la superficie de cada pimiento con un poco de aceite de oliva virgen extra. Para extenderlo pueden emplearse los dedos o un pincel de silicona.

Pimitneos asados

Poner la fuente o bandeja con los pimientos en el horno precalentado a 180 ºC. Tardarán a hacerse entre 1 1/4 y 1 1/2 horas, dependiendo del horno y la cantidad de pimientos. Dar la vuelta a los pimientos a media cocción para que se tuesten por los dos lados.

Sacar los pimientos del horno.

Pimitneos asados

Vamos a dejar que los pimientos "suden" un poco para pelarlos con mayor facilidad. Al sudar la carne se encoje separándose de la piel, con lo que se elimina más fácilmente. Para ello es necesario cubrir bien la fuente o bandeja. Se puede usar papel de aluminio que ajustaremos bien a los bordes para intentar que quede bien cerrado. Si hemos empleado una fuente es muy cómodo hacerlo con una bolsa de plástico. Hay que emplear una que sea fuerte (si no es fácil que se deshaga cuando la toque la fuente caliente) y suficientemente grande para que quepa toda la fuente dentro. Meter la fuente dentro de la bolsa y anudar las asas para cerrarla, intentando que no quede abierta por ningún sitio. Dejar que los pimientos se enfríen así tapados.

Una vez que los pimientos están fríos destaparlos y pelarlos. Eliminar los rabillos y todas las semillas que hay en el interior.

Hacer tiras con cada pimiento y ponerlos en un recipiente que pueda cerrarse herméticamente. Además de los pimientos poner en el recipiente todo el caldo que sueltan los pimientos al pelarlos y el que ha quedado en la fuente o bandeja. Es delicioso para añadirlo a los pimientos cuando los usemos.

Pimitneos asados

Vistos en detalle tienen este aspecto tan delicioso.

Pimitneos asados

Y ya tenemos listos los pimientos para emplearlos como más nos guste. Guardados en un recipiente hermético en la nevera se conservan muy bien durante varios días. Francamente no sé cuántos porque en mi casa independientemente de la cantidad que se haga desaparecen rápidamente.

Simplemente en ensalada sin nada más son un plato perfecto.

Pimitneos asados

Comentarios